Lavadero Municipal

Los lavaderos municipales fueron testigos del esfuerzo y sacrificio de muchas mujeres, también sirvieron de escenario para una nueva forma de ganarse la vida durante la segunda mitad del siglo XIX, cuando la higiene era considerada un -lujo-.

Este trabajo tradicionalmente doméstico, que desempeñaban, las mujeres de familia, madres, hijas y esposas para colaborar en sus cosas, dio nombre a las “lavanderas”, quienes recorrían la ciudad recogiendo la ropa y sábanas en casa de sus clientes, luego se dirigian al lavadero, y finalmente la devolvían, en un día acordado, las piezas limpias, planchadas y listas para su uso.